Muchas gracias a las colegas Laura López y Ana Azrilevich,
que vinieron a contarnos su experiencia.
En la Sardá el horario de trabajo es principalmente por la
mañana. Es la posibilidad de formarte en perinatología, que es una especialidad
que desde la facultad prácticamente no conocemos. El marco teórico es el
psicoanálisis bien entendido. Es decir, el lugar del muerto es un concepto, no
quiere decir quedarse quieto. Cuando se trata de atender mujeres en torno a un
parto, muchas veces es necesario poner el cuerpo. Laura López, concurrente de
segundo año, nos contó que no se imaginaba atender a una mamá adolescente que
iba a vivir la interrupción de su embarazo por graves problemas del bebé. Tomar
contacto con la muerte, es una de las sorpresas que tenía el hospital.
En el Ramos Mejía, como en muchos de los hospitales
generales, el gran hallazgo de la residencia es el trabajo interdisiciplinario,
aprender un idioma profesional que nos permita comunicarnos con los médicos,
sin perder el aporte de nuestro saber y sin caer en dialectos psicoanalíticos.
Ana Azrilevich, residente de segundo año, nos desasnó en materia de rotaciones
dentro y fuera de la residencia. Nos contó que dependiendo el hospital y los
recursos con los que se cuente, hay rotaciones externas e internas. Ella hizo
una de las rotaciones en el Moyano, por ejemplo.
Mientras estudiaba para rendir, Laura Lopez nos contó que ni
siquiera iba a los cumpleaños de los amigos. Ahora se da cuenta de que hubiera
sido mejor darse un poco más de aire. Se trata de estudiar mucho, pero nunca
ahogarse, mucho menos de perderse un cumpleaños.
Ambas tenían temores antes de comenzar. Ambas nos contaron
que una vez ahí, en el hospital, vas encontrando una manera de hacer, con el
tiempo una manera propia de hacer.
El recorrido autoriza. Se trata de poder confiar en eso.
En ResidirenPsico estamos trabajando en un archivo unificado
con datos formales de cada hospital para colaborar en una distribución más
eficaz de los recursos.
Muchas gracias a Nicolás Thomas por tan lindas fotos y a LaVieja Guarida por tanta buena onda.
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